El cambio climático y el aumento progresivo de la temperatura global constituyen, sin duda, una de las amenazas más relevantes y urgentes de nuestro tiempo. Frente a esta situación, EMASAGRA ha reafirmado y profundizado su compromiso ambiental, intensificando activamente sus esfuerzos en sostenibilidad, mitigación climática y mejora del entorno en el que opera.
Con el objetivo estratégico de disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero y de promover un uso eficiente y consciente de la energía, Emasagra ha optimizado su desempeño energético, logrando el menor consumo posible, consiguiendo además que sus instalaciones más relevantes pasen de ser consumidoras de energía procedentes de fuentes convencionales a producir energía fotovoltaica, hidráulica, térmica y por cogeneración. Gracias a esta firme apuesta con la Descarbonización ha logrado ser la primera empresa del país dedicada a la gestión del ciclo integral del agua en alcanzar la autosuficiencia energética en el conjunto de todas sus instalaciones.
Desde el año 2014, Emasagra realiza anualmente el cálculo de su huella de Carbono, una herramienta esencial que permite mantener un control riguroso de sus emisiones de Gases Efecto Invernadero. Esta monitorización ha sido clave para implementar medidas de reducción y compensación, y como resultado, desde el año 2019, la compañía mantiene la neutralidad de carbono en todas sus operaciones. Un logro que ha posicionado a Emasagra como referente ambiental al ser la primera empresa española del sector en alcanzar este hito. Para ello, ha liderado múltiples acciones orientadas a una gestión eficiente de los recursos naturales, la reducción del consumo energético y la implementación de soluciones innovadoras y adaptativas frente a los efectos del calentamiento global.